Escombros
Escena 5. GRAN SALÓN, INTERIOR, SEMIPENUMBRA.
[PLANO ABIERTO DEL TECHO DEL SALÓN; en la parte inferior del encuadre se ven las cabezas de los tres personajes que lentamente se tornan hacia el techo]
[ZUMBIDO INIDENTIFICABLE; es leve en principio pero aumenta en el transcurso de la escena, definiéndose como el sonido de un gran motor]
TH (con una sonrisa nerviosa):
– Ya veo porque el ambiente se caldeó. Tu aire acondicionado es otra cosa que “hay que arreglar”.
M (relajándose un poco):
– Creo que ya debe ser hora.
HR (en tono molesto pero interesado):
– ¿Hora de qué? ¿A qué juegas?
M (con una sonrisa socarrona):
– Hubo un motivo para la larga espera antes de iniciar esta reunión. (Pausa) A esta hora ya debe saberlo todo el mundo.
TH (con una amplia sonrisa y apretando un puño):
– Así que las marchas si influyeron después de todo.
(suelta una carcajada)
HR (se relaja completamente):
– ¡Pues enhorabuena!
M (con expresión amable):
– Pero hay algo más.
M (nuevamente seria, con su cabeza ladeada, mirando a algún punto de su sillón):
– ¡Espero que sea algo importante!
(una voz femenina, en off, algo anodina pero preocupada):
– Lo siento por interrumpirla pero es urgentísimo. Es Peres al teléfono y pregunto explícitamente por usted.