Como profesor los cursos que más disfrutaba siempre fueron los de 3D. La principal razón de ello era que al finalizar, si se trataba de un curso monográfico, preparábamos un cortometraje. Tamaña tarea normalmente requería de trabajar como en un estudio real, preparando grupos con tareas especificas que interactuaban entre sí. Esto le daba un toque especial al cierre del curso.