Un amanecer ilimitado

/ octubre 19, 2012/ Fotografía, Literatura

Para mi ella es Sandra Helena, pero no se llama así. Es una persona hermosa aun más allá de lo evidente. Es también la mejor escritora que he conocido, os recomiendo leer su libro Odios, y… Sí, ella es muy pelirroja.

 

 

Entonces…
Entonces fue un momento
que abrió valles entre las montañas,
las hizo parir ámbar,
como el de tus pasos,
las hizo parir encina,
como la de tus ojos.
Entonces fue el momento
de la doncella de las montañas,
degolló al caballero,
para recuperar su corazón,
degolló al dragón,
para recuperar su libertad.
Entonces se agoto el momento
de las montañas,
compartió su limpio corazón
con la serpiente emplumada,
compartió su limpio aroma
con los duendes del armario.
Entonces yo suplique
que me abrasara en su aliento,
hasta solo dejar de mi duro corazón
un tizón muerto.
Sólo un recuerdo.
Sólo un entonces.
Sólo un por siempre.